Por Iván Flores Noriega
Dentro de la Cuarta Transformación del país que dirige Andrés Manuel López Obrador, existen más de 12 programas de apoyo a los sectores más vulnerables, los cuales maneja la Secretaría de Bienestar, dirigida a nivel nacional por Ariadna Montiel Reyes, y a nivel estatal por Nancy Ortiz.
En el año 2020 se beneficiaron con estos programas en Oaxaca a más de un millón y medio de personas, por un monto total de 12 mil 114 millones, y en el pasado 2021 casi el doble con más de 23 mil millones de pesos.
Dentro de los programas se encuentran: la Pensión para los adultos mayores, La escuela es nuestra, Becas Benito Juárez, Jóvenes Construyendo el futuro, Tandas para el Bienestar, Crédito a la palabra y Sembrando vida, todos para estudiantes, trabajadores o mayores de 65 años, no para ninis como repiten los desestabilizadores de la información.
Pero porque digo que este es el último año de mantener ninis y desviar recursos, primera porque cada vez son más las personas que se dan cuenta que es un apoyo para grupos vulnerables y no para quienes ni estudian ni trabajan y segunda porque es el último año del PRI en el gobierno, con lo cual se acabarán los desvíos.
O prefieres, que este recurso se vaya para las bolsas de los funcionarios como en la administración actual, donde la Comisión Estatal del Agua pagó más de 10 millones de pesos a una empresa fantasma para supuestamente la Ampliación del Sistema de Agua Potable, o el millón y medio de pesos que pagó en honorarios y viáticos, la Comisión Estatal de la Vivienda a personal sin capacitación, y no lo digo yo, lo denunció el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de Oaxaca (OSFE).
También, con el pretexto de la pandemia, se pudieron paralizar la entrega de apoyos, como lo hizo el DIF, con ambulancias, equipos auditivos y alimentos, víveres que pudieron ayudar a los más de 2 mil oaxaqueños que han muerto por desnutrición durante la actual administración estatal según el INEGI y eso que al DIF se le aumentó el presupuesto en mil 300 millones de pesos
Entonces, o seguimos el ejemplo de la Federación apoyando a grupos vulnerables o seguimos el ejemplo estatal del desvió y nula justificación del recurso, eso sí los tiktoks no faltarán.
