Sin renunciar a la DDHPO y sin título profesional desigan como Fiscal de Oaxaca a Bernardo Alamilla

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Bernardo Rodríguez Alamilla actualmente titular de Defensoría de los Derechos Humanos de los Pueblos de Oaxaca, sucesor de Arturo Peimbert en la citada dependencia, hoy también le heredará la titularidad de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca.

El anunció se oficializa en estos momentos en el congreso del estado de Oaxaca, en un proceso bastante turbio donde la orden viene del Gobierno del Estado a cargo de Salomón Jara, a pesar de que la Fiscalía es un organismo autónomo, el titular del poder ejecutivo dispone quien se se va y quién llega.

La designación es respaldada por los diputados de la LXV legislatura local, en su mayoría morenistas y que sirven como tapete de Jara Cruz.

El paso de Rodríguez Alamilla en Derechos Humanos fue opaco, con 34 crímenes en 2022, Oaxaca se convirtió en el estado más peligroso para la defensa de derechos humanos en México, le siguen Guerrero, Chiapas y Chihuahua con 25, 14 y 10 casos, lo anterior de acuerdo con Servicios para una Educación Alternativa (Educa)

Los casos más relevantes en la entidad y que quedaron sin resolver, son el de Claudia Uruchurtu en Nochixtlán, Oaxaca;cuatro defensores de San Esteban Atatlahuca y la ambientalista Irma Galindo.

De acuerdo con la revista Proceso, en Oaxaca cada tercera persona defensora asesinada, defendió la tierra y el territorio. El 91% de ellos pertenecian a un pueblo indígena.

El que Bernardo Alamilla, llegué a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca, es sinónimo de impunidad pues si como defensor de derechos no hizo nada, como Fiscal estará sometido a los intereses políticos de quienes los pusieron en el puesto.

Su anticipada imposición ha encendido los “focos rojos” en la Agencia Estatal de Investigaciones ( AEI), ya que esté individuo es la continuación de Arturo Peimbert Calvo, quién renunció a la FGJE hace unas semanas y emprendió la huida a la ciudad de México para tomar un cargo en el gobierno federal.

Los agentes policiacos afirman que la llegada de este individuo no cambiará nada, pues es más de lo mismo, un cómplice más del que se fue.