Oaxaca, Oax.— Tras 46 días sin noticias de la activista mixe Sandra Estéfana Domínguez, su familia anunció el retiro del plantón que mantuvieron durante 13 días frente al Palacio de Gobierno en Oaxaca. Denunciaron hostigamiento, falta de avances en la investigación y un trato insensible por parte de las autoridades estatales.
En un recorrido alrededor del zócalo capitalino, la madre y las hermanas de Sandra reiteraron su exigencia de justicia y su decisión de trasladarse a la Ciudad de México para instalarse frente a Palacio Nacional.
“Aquí no hay escucha, no hay trato digno. El gobierno de Salomón Jara dejó claro que la desaparición de mi hermana será un caso más para él”, expresó una de las hermanas.
Denuncian hostigamiento y simulación
La familia acusó al gobierno estatal de evadir su responsabilidad y obstaculizar su protesta. Señalaron que durante las primeras semanas tras la desaparición de Sandra, fueron citados a múltiples reuniones con diferentes dependencias, pero sin avances concretos:
“Nos pasearon de oficina en oficina con las mismas diapositivas y explicaciones vacías. No buscan a mi hermana, solo justifican sus salarios”.
Además, denunciaron una serie de acciones que calificaron como hostigamiento: cortes de luz en el campamento, amenazas de cobros por supuestos daños, acusaciones infundadas de venta de alimentos y la remoción de un baño seco donado por colectivas, bajo el argumento de que era un “foco de infección”.
“Es inhumano y lamentable. Mientras nosotros estamos en la calle exponiéndonos al frío y la inseguridad, ellos siguen posando para fotos en sus oficinas. No les importa nuestro dolor”, señalaron.
Una lucha que trasciende fronteras
La familia de Sandra aseguró que su traslado a la Ciudad de México responde a la necesidad de buscar instancias que realmente escuchen y actúen. También hicieron un llamado a la Defensoría de los Derechos Humanos para que investigue la actuación de las autoridades estatales y las denuncias previas de la activista, quien había señalado irregularidades en el ámbito gubernamental antes de su desaparición.
“Las mujeres indígenas Ayuuk tenemos dignidad. El nombre de mi hermana no será manchado por un gobierno como este. Seguiremos luchando por ella, porque no es solo una desaparición más, es nuestra hermana, hija y madre”, afirmaron.
Solidaridad frente a la adversidad
Pese a las dificultades, agradecieron el respaldo de colectivas, familiares y ciudadanos que los acompañaron durante el plantón en Oaxaca. Relataron noches de miedo debido a la violencia en los alrededores del campamento, pero también destacaron el apoyo de personas que llevaron alimentos y alzaron la voz junto a ellas.
“Nuestra vida se detuvo, pero la de los funcionarios sigue como si nada hubiera pasado. Solo esperamos que jamás vivan este dolor prolongado”, concluyeron.
Exigen justicia y fin de la impunidad
La familia responsabilizó al gobierno de Salomón Jara Cruz por la desaparición de Sandra y por cualquier acto de represalia contra quienes los han apoyado. Reiteraron su exigencia de justicia y su compromiso de no descansar hasta encontrarla.
Sandra Domínguez, activista mixe, desapareció hace más de un mes. Su caso deja en evidencia las graves deficiencias en los protocolos de búsqueda y atención a víctimas en Oaxaca. Mientras tanto, su familia continúa la lucha, ahora desde la capital del país, para que su voz sea escuchada y su caso no quede impune.
COMENTARIOS