No sólo el ambulantaje impide el paso en las angostas calles de Oaxaca de Juárez, ahora los comerciantes y transeúntes viven en un riesgo latente ante la venta de pirotecnia que se vende sobre las banquetas.
Sin ninguna medida de protección como lo son extintores, los cohetones se eciven en cajas de madera principalmente sobre la calle Aldama afuera de los mercados 20 de Noviembre y Benito Juárez.
Comerciantes establecidos han denunciado que aparte de estorbar e impedir el paso para caminar en las banquetas ahora ocupan el paso de cebra y los cajones de estacionamiento para personas con discapacidad, donde cada día meten puestos nuevos y cambian de giro cada que se puede.
Todo esto con autorización del propio gobierno municipal encabezado por Oswaldo Jarquín, quien ha hecho todo menos poner un alto al ambulantaje e incluso pactando con ellos la venta de más espacios y negociar con los vendedores de a pie para que puedan ingresar al zócalo y alameda por una fuerte suma de dinero (esta información la realizaremos en otra entrega).
La ciudadanía ha tachado a García Jarquín como el peor presidente municipal que ha tenido Oaxaca de Juárez, y quien contrario a los principios morenista de “No Traicionar” este personaje ha dado la espalda a los ciudadanos que votaron por él, creyendo que iba haber algún cambio y sin embargo pacto con los líderes ambulantes para que sigan manteniendo el control de las calles.
En esta temporada Navideña el riego de accidentes aumenta en un 90% por la quema de explosivos, aunado a esto los más de 50 puestos que se ubican en la calle de Aldama, ante alguna contingencia sería mortal por no contar con espacios para donde salir.
