¿Qué pasa con el sexo durante el confinamiento? Un estudio revela que en México la epidemia del covid-19 también ha repercutido en la vida íntima de la población; para el 43.08 por ciento de las personas encuestadas la sexualidad disminuyó, mientras que solo el 4.14% reporta un incremento de su actividad sexual. El 52.78% informó que no ha tenido cambios al respecto.
De acuerdo a la Asociación Mexicana para la Salud Sexual, A.C (AMSSAC) las fantasías sexuales se incrementaron casi un 34%, las caricias disminuyeron en el 40% de las mujeres y en el 30% de los hombres, mientras que el sexo virtual (sexting y videollamadas) también se incrementó en el 39.10% de los hombres y en el 35.9% de las mujeres. En el caso de las mujeres que viven solas dicho porcentaje alcanza el 41.50%.
El estudio se realizó el pasado mes de mayo y revela, asimismo, que la respuesta sexual durante el confinamiento está relacionada con la presencia o no de niños en hogar y si se comparte el hogar con familia extendida. También distingue sus efectos en las personas que viven solas.
La AMSSAC informó que el propósito de la encuesta ha sido explorar cómo se relacionan estos cambios con los niveles de psicopatología (estrés, ansiedad y depresión) y los niveles de violencia sexual en la pareja.
No podemos hacer suposiciones de que todos los mexicanos han tenido una modificación en su conducta sexual, porque no sería preciso”, detalló el director general de la asociación, Eusebio Rubio Aureoles, al presentar los resultados de este trabajo, aplicado en línea a 1, 785 personas entre los 18 y 80 años de edad, la mayoría (66.23%) mujeres.
El estudio hace énfasis en la violencia de género durante el confinamiento. Las y los participantes reconocieron desavenencias con sus parejas, entre otras, el 62% aceptó su enojo cuando la pareja no está de acuerdo o le contradice; el 48% dijo que le grita a su pareja; y el 33% que no toma en cuenta las necesidades sexuales de su pareja. Los insultos registran un 28%.
Al respecto, Esther Corona, vicepresidenta de la Asociación Mundial para la Salud Sexual (WAS), comentó que este estudio constituye “un retrato dinámico de lo que ocurre en una buena parte de la población” y por eso “nos dice mucho de la realidad actual”. Sin embargo, subraya que la muestra no es representativa de todo el país ya que solo se pudo consultar a quienes tuvieron acceso vía internet.
La experimentada sexóloga alertó también sobre la violación de derechos humanos que la sexualidad genera al interior de la familia o de la vida en pareja, a partir de la diversidad de identidades, edad y preferencias que configuran el mosaico de la sexualidad en la sociedad.
Paulina Millán, investigadora del IMESEX, señaló que este trabajo es un termómetro para aproximarse a la salud sexual de la población pues está relacionada con varias esferas de la vida (relación de pareja, salud mental, vínculos humanos).
Dijo que la depresión se conecta con la sexualidad y que por ello la investigación es indispensable para tomar decisiones en materia de salud pública, subrayando que sin salud sexual no puede haber salud integral.
