Ciudad de México.- Cada año se conmemora el Día Mundial del Riñón en el segundo jueves de marzo, fecha para hacer conciencia sobre la importancia de este órgano con el objetivo de prevenir las enfermedades renales que afectan a la población.
Los riñones son los encargados de filtrar los desperdicios en la sangre y el exceso de agua (en forma de orina) y ayudan a mantener el equilibrio de sustancias químicas (como sodio, potasio y calcio) en el cuerpo. Cuando estos pierden la capacidad de filtración, pueden acumularse niveles nocivos de desperdicios que provocan desequilibrios en la composición química de la sangre. La insuficiencia renal requiere de un tratamiento intensivo y puede llegar a ser fatal.
Los datos estadísticos de la cartera de GNP Seguros, reportaron 4 mil 153 casos relacionados con problemas de riñón, con un monto total pagado cercano a los 704 millones de pesos, monto que con respecto a 2020, tuvo un incremento del 22%, mismo que es un efecto derivado de la pandemia, ya que las personas pospusieron la atención de casos no relacionados con Covid-19. El 54% de estos padecimientos se dieron en hombres y el 46% en mujeres, aunque el 61% del monto pagado corresponde a las atenciones en hombres.
Además, en los últimos 3 años el mayor número de casos se presentaron en el rango de edad de 40 a 49 años. La cartera de GNP Seguros también muestra que en los últimos 5 años los padecimientos renales con mayor número de casos registrados han sido el de cálculo de riñón y uréter, mismos que han representado en promedio el 43% del monto total pagado por padecimientos renales.
De acuerdo al Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) al menos 11% de la población
mexicana padece algún grado de enfermedad renal y 8 de cada 10 no lo saben. Conocer los primeros síntomas de una enfermedad renal es clave ya que algunos pueden no percibirse por la manera sutil en la que se desarrollan:
- Presencia de cambios al orinar: incremento o decremento de la cantidad y/o mayor
frecuencia.
- Cambios en la orina: puede ser de un color más claro o presentar sangre.
- Retención de líquido, lo que se puede manifestar en hinchazón de pies y manos.
- Cansancio y fatiga sin causa aparente.
- Problemas para dormir
- En algunos casos se presenta un ligero sabor a metal en la boca.
- Náuseas, vómitos o pérdida de apetito y peso sin razón.
- Presión arterial alta.
Una vez que se presentan estos síntomas pueden incidir notablemente la calidad de vida, por ello es importante tomar las siguientes medidas para llevar una vida saludable y reducir en medida de lo posible los riesgos de presentar una enfermedad renal:
- Mantenerse en forma y activo físicamente.
- Controlar regularmente el nivel de azúcar en sangre.
- Vigilar la presión sanguínea.
- Comer sano y controlar el peso.
- Mantener una ingesta de líquidos sana.
- Evitar el tabaco y el alcohol.
- No tomar medicamentos sin receta médica.
Llevar un estilo de vida saludable puede ayudar a reducir el riesgo de padecer enfermedades renales, sin embargo, también es importante mencionar que enfermedades crónicodegenerativas no controladas como la diabetes y la hipertensión arterial, la obesidad y los altos niveles de colesterol, pueden contribuir al desarrollo de la afección renal, por lo que es fundamental llevar un tratamiento adecuado de estos padecimientos con supervisión médica constante.