En una sesión extraordinaria, el Consejo General del INE avaló el registro de María Elena Ríos como candidata a diputada suplente por la vía plurinominal, pese a no cumplir con los requisitos establecidos.
Aunque se postuló en una acción afirmativa de persona indígena, no acreditó su residencia en esa Circunscripción ni su dominio del idioma mixteco. A pesar de la controversia, su candidatura fue respaldada por nueve votos a favor, destacando la intervención de la consejera Carla Humphrey, quien pidió una excepción debido a la violencia de género que ha enfrentado Ríos.
No obstante, esta decisión ha generado polémica, especialmente por las discrepancias entre Ríos y el presidente de Morena, Mario Delgado. Ahora, Ríos se encuentra en una posición incómoda al ser candidata suplente por un partido cuyo líder rechaza, lo que plantea interrogantes sobre su compromiso con la agrupación política.
“Conmigo se equivocaron y no voy a permitir que manchen mi nombre” dijo en alusión a la candidatura del ex gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, quien también ha sido postulado para un escaño plurinominal en el Senado.
Finalmente, es candidata suplente a una diputación federal por un partido donde aborrece a su presidente nacional lo que ha dejado en claro la radiografía de como ha sido Maria Elena Ríos en su trato con las personas.