Por Rubén Mújica Vélez
Reitero mi satisfacción por conocer los últimos 17 años a AMLO, excepcional ejemplo de un “político practico” (en la lúcida definición de Gramsci y no la pedestre de Peña Nieto) Es decir, “sembrador” de utopías y realizador de proyectos.
Con una veintena de libros, cimenta sus ideas en un intenso análisis de la historia. Como Presidente, dejará un legado constructivo aun incomprendido que pugna por atenuar el grave desequilibrio regional que sería la base de un desarrollo social menos desigual.
He corroborado su voracidad por el estudio y obvio el amor por los libros. A la par de este ejemplo sufrimos la ignorancia y vulgaridad absoluta de seudo políticos. El Desgobernador de Zacatecas alegre, juvenilmente, suscribió un convenio con Ken Salazar (“El chico de la bomba”) para capacitar policías zacatecanos mediante el financiamiento y asesoría de los “gabachos”.
Monreal II porque en la gubernatura ya hubo un Monreal I, ignora que Convenios Internacionales solo los puede suscribir el Presidente de la República. Francio X del Art. 89 de la Constitución Política de México. Porque su “brother” que pastorea la JUCOPO del Senado y presume de catedrático en Derecho en la UNAM, no lo medio orientó?
Que esperar de seudo Gobernadores con “Asesores” que ignoran la Constitucion? Solo barrabasadas.
Los otros indignantes casos los de la Sra. Tellez, legisladora de procacidades que no aporta iniciativas de ley y sí cataratas de procacidades. Y como “cereza del pastel” la deslenguada suripanta que vocea su “habilidad” escatológica y cobra dietas, dinero del pueblo, por revelar su origen arrabalero.
Sin duda en el ámbito de los representantes populares, vivimos un ejemplo dignificante y a la par transitamos a remolque de la idiocia y por un túnel inmundo.