Un grupo armado acudió a rescatar a 51 internos que purgaban diversas condenas en el penal de Aguaruto en Culiacán, Sinaloa. En un momento se habló de dos celadores muertos pero el día de hoy fue desmentido por las autoridades. Se informó que dos reos también fueron capturados y un reo que disparó contra las autoridades fue abatido.
Esto ocurrió en el momento en que la capital sinaloense entraba en crisis por enfrentamientos suscitados en zonas céntricas y comerciales de Culiacán., capturados
Un video que se viralizó en redes sociales fue la evidencia del momento en que los reos salen corriendo hacia la carretera Culiacán–Navolato para ser retirados con rumbo desconocido. Hasta el cierre de la presente edición, unos cuantos fueron recapturados, así lo confirmó el propio secretario de Seguridad Pública (SSP), Cristóbal Castañeda.
La identidad del fallecido no fue revelada por las autoridades de Seguridad Pública.
Tras verse interrumpida la tranquilidad de la ciudad con una serie de tiroteos en zonas importantes de Culiacán por su actividad comercial y recreativa por parte de integrantes de la delincuencia organizada que se alzaron en armas, fue aprovechado por los mismos internos que, de acuerdo con lo dicho por Cristóbal Castañeda, ellos mismos fueron los responsables de amedrentar y someter a los custodios para lograr salirse por la “puerta grande”, lograron liberarse de manera ilegal.
En el video difundido se mostró claramente el momento en que los internos salían hacia el exterior, y en plena carretera Culiacán–Navolato, con apoyo de sujetos que portaban armas largas, despojaban vehículos para poder escapar. “Los están liberando, se están llevando carros”, decían quienes grabaron el momento en que los reos corrían por todas direcciones, unos subiéndose en camionetas, una de ellas color blanco.
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública aseguró la evasión de reos y, de igual forma, habían reaprehendido a cuatro de ellos, asegurando, además, que la situación dentro del complejo penitenciario ya estaba bajo control.
Cabe mencionar que tras el reporte se estableció un cerco de seguridad en las afueras por más de dos horas, donde elementos de la Marina, Guardia Nacional y agentes de la Policía Estatal y Federal se postraron con sus rifles, sin permitir que peatones ni automovilistas cruzaran hacia la sindicatura de Aguaruto ni Navolato.
Quienes lo intentaban eran advertidos que se retiraran por seguridad, apuntando con sus armas largas.
“Queremos llegar a casa”, mencionaban quienes estaban atrapados entre el hermetismo y la confusión.
Mientras el sol comenzaba a ocultarse, se escucharon detonaciones de armas cortas en forma pausada; y de pronto, ráfagas de rifle que hicieron que los civiles que estaban esperando el momento por regresar a casa (más de dos docenas de personas), se dispersaron por temor, y los policías se atrincheraron en espera de un enfrentamiento, el cual no pasó a mayores, pues los uniformados desconocían si los disparos fueron al aire para tratar de dispersar un motín, pero por cualquier sorpresa llegaron refuerzos de la Policía Federal, que se escondieron empuñando sus armas viendo entre los cristales de sus patrullas.
El último escape
De acuerdo con datos periodísticos, a mediados del 2018 fue reportado el último escape del penal de Aguaruto. Se trató de dos custodios que ayudaron a dos reos, también uniformados, quienes burlaron la seguridad de dicho inmueble para poder salir sin ningún problema y posteriormente abordar otros vehículos, cuyos conductores ya los estaban esperando.
En esa ocasión Cristóbal Castañeda ostentaba el cargo de subsecretario de Seguridad Pública, e informó que uno de los reos era el encargado de monitorear las cámaras de seguridad del Módulo Nuevo, las que no estaban conectadas a C-4.
