Aeropuerto Benito Juárez y Aeropuerto Felipe Ángeles

Aeropuerto Benito Juárez y Aeropuerto Felipe Ángeles

Sobre las juventudes y los cambios sociales
Economía y Política, dos entes inseparables
La más dura decisión

El Benito Juárez cuenta con 2 pistas, su proximidad impide aterrizajes y despegues simultáneos. Al sumar 61 de ambos movimientos por hora se ha saturado, es el límite. Las consecuencias son los despegues y aterrizajes que tienen que “hacer cola”, en tierra los primeros, los segundos en el aire sobrevolando varios minutos con mayores gastos.

Ha tenido el Benito Juárez que construir otra terminal y transporte para su comunicación, el proyecto de Peña Nieto era en zona fangosa, desaguan en esa área cuatro lagunas del Valle de México y el suelo se hunde, por lo que sería muy costoso el mantenimiento de las pistas, la complicada red de ductos subterráneos.

La Torre de Control apenas semi construida se hundía. Para consolidar pistas y estructuras se destruyeron los lomeríos próximos a Tláhuac. Los convirtieron en socavones al extraer miles de toneladas de tezontle con altísimo daño ambiental. Se proponían derruir el Aeropuerto Benito Juárez y crear un emporio comercial para clases adineradas.

En 2017 AMLO visitó la obra faraónica y opinó sobre su cancelación. Para entonces atendía 60 millones de viajeros al año.

el “Felipe Ángeles” empezará a operar su Etapa I y crecerá según evolucione la demanda. Conservadoramente se estima atender 20 millones de pasajeros anuales. Expertos opinan que podrían llegar a 30 millones.

Ejecutar su Etapa I permite no construir un aeropuerto magno con alto costo financiero. Se invertirá al paso de la demanda. Cuenta con 3 pistas, 2 comerciales y una militar. La distancia entre las dos pistas permitirá aterrizajes y despegues simultáneos.

Se acabarán las “colas” para despegar y aterrizar y habrá ahorro en combustibles. Las pistas de 4 mil 500 metros son las más largas del país. Tendrá solo una instalación para su operación. Señalemos que la complejidad de construir un aeropuerto se deriva no sólo de sus instalaciones sino de las vías para su acceso fluido.

Contará además con museos, zona comercial, hotel y etc. Se elogia la celeridad de China en la construcción de un aeropuerto. El último le llevó cuatro años, a Ámsterdam siete años, a Turquía siete años, a Berlín diez y quedó mal hecho.

El Felipe Ángeles requirió tres años para sorpresa de extranjeros. Entre las instituciones foráneas que han certificado su construcción y eficiencia participó la Universidad de Ciencias Aplicadas de Ámsterdam con su área Especializada en Aviación y Aeropuertos saturados. El grupo de esa institución holandesa está coordinado por el Dr. Miguel Antonio Mujica Mota, mi hijo. Su lapidario juicio sobre esta obra magna fue; es una hazaña de la capacidad de los ingenieros militares mexicanos.