Se cumplen 14 días de las movilizaciones implementadas por los trabajadores de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), ante la inoperancia del secretario Juan Carlos Márquez Heine, quien no ha querido resolver los conflictos ni tampoco las acusaciones en su contra por corrupción, desvío de recursos y uso de empresas fantasma.
A esto se le suma que tres sectores de la dependencia se mantengan en protesta, los primeros son trabajadores sindicalizados del extinto seguro popular, le siguen los del programa U013 y finalmente vectores quienes tiene cerrada la Jurisdicción Sanitaria de Valles Centrales.
Este día los integrantes del Sindicato Independiente de Trabajadores del Sector Salud, adheridos al programa U013, tomaron las oficinas de la dependencia en la calle de Violetas, para acusar que Márquez Heine ha sido omiso en el pago desde el mes de enero de personal que trabaja en zonas de alta y muy alta marginación como son médicos, enfermeras, nutriólogos, psicólogos y que debido a la manifestación que realizan han dejado sin atención a sus pacientes.
Los inconformes acusaron que desinterés del Secretario los trabajadores ya no pueden presentarse en las unidades ya que al no tener dinero, no pueden solventar sus transportes y alimentación, la falta de recursos también a pegado en sus familias pues desde hace tres meses no cobran.
Los afectados son un aproximado de 350 trabajadores, de los cuales ninguno ha recibido un solo pago, a pesar que cada año queda un remanente para solventar los pagos de los trabajadores los primeros meses de cada año, en lo que la federación envía los recursos.
Acusaron a Juan Carlos Márquez Heine de no haber entregado el recurso asegurando que probablemete lo está utilizando para otros rubros que no corresponden a la salud, en este sentido afirmaron que ya dieron aviso al INSABI a nivel nacional, sin embargo, les respondieron que desde febrero ya habían enviado el dinero para cubrir este año.
Los trabajadores se cuestionan en donde está el dinero del año pasado y de este año, por lo que lo responsabilizan de cualquier cosa que pueda pasar con la ciudadanía y con sus compañeros, ya que en plena pandemia no los deja sin recursos económicos y además sigue robando el dinero de los oaxaqueños.
“No es posible que un fuereño nos venga a robar, por eso lo responsabilizamos de lo que pueda pasar, porque ya estamos hartos y vamos a radicalizar nuestro movimiento ojalá y así nos hagan caso” señaló una de las trabajadoras inconformes.